Si te menciono cualquier razón de delitos sexuales, lo primero que se nos viene a la cabeza es un adulto cometiendo este tipo de atrocidades. Sin embargo, no solo es cosa de mayores de edad, aunque cueste creerlo. También hay menores de edad que se involucran en actos como estos.
¿Un menor de edad puede cometer un delito sexual?
Por lo que he visto en muchos casos, definitivamente sí. A pesar de que el Código Penal se enfoque en hablar de estos crímenes contra menores, algo distinto me ha dicho mi experiencia como abogado penalista. La experiencia me ha hecho vivir múltiples casos de defensa particular o acusación a adolescentes y mayores que han sido encontrados culpables.
Interpretando la ley, entendemos los menores de edad no tienen responsabilidad penal (artículo 19 del CP). Entonces, la gran pregunta es ¿qué pasa si un joven delinque en este contexto?
Lo primero que debo aclararte es que la aplicación legal en estas situaciones no es la misma que para un adulto. Al menos así es en España, lo que implica más complejidades a la hora de llevar estos casos.
El factor edad es uno de los elementos más relevantes con el que nos encontramos todos los abogados especialistas en delitos sexuales de cara a un escenario de esta índole.
¿Cuándo es posible imputar un delito sexual cometido por un menor?
Como te explico antes, hay ciertos parámetros que se establecen al momento de juzgar a un menor como presunto responsable de un crimen sexual. Ahora bien, antes de responder esta pregunta, te voy a explicar brevemente qué es un delito sexual.
Siendo honestos, las leyes en España podrían leerse un tanto ambiguas para hablar de esto. Sin embargo, dicho con la mayor simplicidad son las acciones que vulneran la libertad sexual de un sujeto.
Volviendo al tema y con esta aclaración, ahora si puedo comentar de dos modos de ver los delitos sexuales por un menor de edad:
- Cuando el menor tiene un rango de edad de 14 y 18 años deberá cumplir con los programas de formación en materia sexual que disponga la ley.
- Si el menor en cuestión tiene menos de 14 años, no se le aplica responsabilidad penal. Sin embargo, los padres corren con la responsabilidad civil.
Estas medidas legales se acogen a lo descrito en la Ley Orgánica 10/2022 (LORPM), que hace especial alusión a estos casos.
¿Es justo que un menor de edad no vaya a prisión por un delito sexual?
Se trata de una pregunta con múltiples aristas y enfoques. En mi camino como abogado he estado de ambos lados (víctima y victimario). En ningún caso, los padres querrán ver a su hijo o hija en la cárcel.
Para ponerte en contexto, hace poco se encontró responsable a una niña de 13 años de llevar un chat de WhatsApp de pornografía en la que participaban otros menores con edades similares.
El contenido que se retuvo tras varios allanamientos era de terror: imágenes sexuales explícitas, abusos y mutilaciones.
¿Cuál fue el tratamiento legal de la jurisprudencia?
Era una red con más de 1500 miembros, todos menores de edad. Ahora, cómo se trataba de un sujeto activo de 13 años, no fue posible imputársele un delito sexual. Algo que podría ser contraproducente para muchos.
Todas las actuaciones a seguir, en este caso particular, son competencia del juzgado penal juvenil. Sin embargo, como mencioné con anterioridad, el castigo no va más allá de programas de educación.
¿Hay un incremento en los delitos sexuales por menores de edad?
¡La respuesta es sí! Esto es una realidad inminente que muchos no quieren ver, pero que sigue ocurriendo.
La Fiscal Superior de la Comunidad de Valencia declaró hace algunos meses que son los jóvenes (adolescentes) menores de 14 años quienes lideran la lista de delitos sexuales, ¡esto es alarmante!
Hay muchas personas preocupadas por estas cifras y la fiscal ha hablado sobre la posibilidad de reducir la edad penal considerar un procedimiento mucho más duro a la hora de condenar estos actos.
Independientemente del tratamiento legal que se le da a estos hechos criminales, la denuncia es crucial para lograr la justicia debida, así como el asesoramiento de un abogado.
Por otro lado, no hay que olvidar la importancia de la educación desde las bases, en el hogar. Esto último es realmente significativo cuando se trata de prevenir el delito sexual.