Cuando decidí ser abogado, jamás pensé que tendría que ver tantos casos de violencia de género. En todos estos años me he encontrado con situaciones complejas.
Aunque hay casos como estos que se gestionan en juicios rápidos, no te diré que sea fácil ver mujeres violentadas por sus maridos…
¿Por qué el delito de violencia de género se resuelve en un juicio rápido?
En el mundo de lo penal, mucha gente se pregunta por qué algo tan terrible como el maltrato a la mujer se puede gestionar en un proceso rápido.
Bueno, lo primero que te explicaré sobre esto es que se lleva a cabo de esta forma porque según la norma, es posible enjuiciar los crímenes con penas que no superen los 5 de cárcel (artículo 795 de la LECrim).
Ahora que tienes clara la norma, permíteme decirte que el hecho de que un delito se vea en juicio rápido no le resta importancia.
Estos procesos se realizan para dar rapidez en la resolución, pero esto no es todo, sino que tienen un fin importante: preservar las garantías procesales y dar una respuesta contundente.
¡Ah!, y no todos los delitos se juzgan así…
¿Qué pasa durante el juicio rápido por violencia de género?
Cuando tengo que llevar un juicio como este, debo recopilar información a la velocidad de la luz y es porque todo pasa realmente rápido.
El Juzgado de la Mujer atiende las denuncias como estas e inicia el juicio cuanto antes y esto pasa, por lo general, el siguiente día hábil, es decir, si denuncias hoy lunes, mañana martes, podrían estar en diligencias, siempre que no sea día festivo calendario.
Las diligencias urgentes se hacen en las horas en que se efectúa la audiencia y ¿Qué es esto?, pues simple, son los actos del juzgado para investigar si existe el delito o no.
Cuando se cumple con esto, viene la parte complicada en la que se hace la presentación de un escrito de acusación. Para este momento, si estás siendo culpado, vas a tener claro que castigo tiene tu acción.
Aquí tienes dos opciones, o te declaras responsable de lo que dice el escrito (lo que puede ayudarte a tener una pena menor) o se presenta un escrito de defensa y avanzas a un juicio oral (15 días después).
Entonces, ¿Cuánto dura el procedimiento?
Es normal que tengas dudas con los tiempos y te lo dejaré más claro. El juicio rápido se llama así porque es rápido.
Desde la detención y cuando el acusado se pone en disposición, no pasará demasiado tiempo para que el juzgado empiece a investigar (máximo 72 horas).
Esto es así, pues una persona no puede estar detenida por más de este tiempo, claro está.
Cuando declaras y la otra parte lo hace, el fiscal y el abogado de violencia de género presentan sus argumentos y tienes las opciones de las que te hablé antes.
A fin de cuentas, si no te admites culpable, vamos a juicio oral, el proceso se hace en los 15 días siguientes y tendrás una sentencia en 3 días.
Si sumas todo este tiempo, no dará más de 20 días entre una gestión y otra, lo que evidentemente marca una gran diferencia con el juicio normal.
Ahora bien, puede que la sentencia no te guste mucho y ahí se puede pensar en apelar en 5 días máximo (lo que alarga más el asunto).
En un juicio de este tipo ¿Qué ventajas tiene la víctima?
Puede que mires el proceso rápido como una desventaja si sufriste maltrato y quieras que se investigue más.
Sin embargo, si el juez encuentra culpable a tu agresor, recuperarás tu tranquilidad mucho más rápido a tener que esperar por un juicio interminable.
Fíjate, te pongo en contexto con este ejemplo de un hombre que le condenaron a dos años tras las rejas por maltratar a su mujer.
Gracias a la denuncia y al juicio rápido tuvo lo que merecía: dos años de cárcel y 6 meses adicionales para proteger a la víctima de un acercamiento.
El proceso fue realmente rápido y se logró resguardar la integridad de la mujer maltratada ¡Claro!, seré honesto que esto no siempre pasa así.
Hay mujeres que denuncian varias veces y desgraciadamente no tienen el apoyo policial suficiente, pero esto es otro asunto del que os hablaré luego…